La muerte se puso una cara de monstruo
una cara de monstruo horíble...
esperó y esperó detraás de la esquina.
Salio al fin de la sombra
como un trazo de sombra
y el niño huiyó mas rápido
que su proprio alarido.
Entonces la muerte se puso otra cara:
una vieja cara de mendigo
esperó, esperó y esperó en frente a Iglesia
estiendendo la mano y gimiendo su pena
y el niño , no supe que hacer con su piedad...
Entonces la muerte se puso otra cara:
una cara de mujer hermosa
esperó, esperó y esperó, con los brazos abiertos
tan maternal, tan fiel y persuasiva,
que el niño quedó imóvil, de susto y de ternura...
Entonces la muerte sacó su última cara:
un cara de juguete inocente,
esperó, esperó y esperó tranquila en ñla bohardilla,
tan quieta, tan trivial, TAN sedutora...
lunes, 19 de julio de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario